El viaje de un menor empieza mucho antes de salir de su casa, su viaje comienza cuando ve a su vecino que llega de Europa o escucha las historias que cuentan en su barrio, su pueblo o su casa, en ese momento comienza a gestarse la idea del viaje, del cambio de vida, del sueño de una vida más fácil marcada por el estilo europeo. Una vez madurada la idea, a veces con la bendición paterna y otras no, comienza lo que puede ser una aventura, un compromiso con su familia o una salida de un oscuro callejón personal…
Después de cruzar el umbral de su casa comienza una nueva vida, más allá de su imaginación, que le llevará a cruzar el mar y llegar al país de destino. Un viaje a través de su persona donde se dará de bruces con una realidad muy diferente a la soñada desde su casa, donde verá sus límites y hará frente a sus frustraciones. Ahí es donde queremos estar nosotros, donde queremos acompañarle, acompañando en la construcción de su identidad, recordándoles de donde vienen y quienes son, posibilitándoles el entender la nueva vida que han emprendido, la sociedad que les rodea y las personas que comparten con él el mundo.